Aquí tenéis a Kenney, un niño con autismo que gracias a la musicoterapia ha mejorado enormemente como persona. Más contacto visual, más sociabilidad y mayor confianza en sí mismo.
Aquí tenéis a Kenney, un niño con autismo que gracias a la musicoterapia ha mejorado enormemente como persona. Más contacto visual, más sociabilidad y mayor confianza en sí mismo.